Le he puesto este nombre porque es una lasaña que mezcla capas de carne y de pisto para usar menos carne. El resultado es un plato contundente, aunque un poco más saludable.
Lo que haremos será: 1) hacer un pisto de verduras que nos debe quedar denso para que forme una de las capas de la lasaña, 2) hacer una carne picada de relleno para la otra capa y 3) montar la lasaña propiamente dicho.
Los pasos 1) y 2) se pueden hacer el día (o días) antes e incluso congelarlos, para tenerlos disponibles y hacer la lasaña en un pis-pás.
La receta es para unos 6-8 comensales.
Trocearemos las cebollas y el ajo y los pondremos a rehogar.
Cuando las cebollas estén ya blanditas, añadiremos el pimiento en trozos y continuaremos sofriendos.
Cuando el pimiento esté blandito, añadiremos los calabacines en trozos finos. En mi caso no los he quitado toda la piel.
Cuando el calabacin esté hecho, añadiremos el tomate triturado y lo dejaremos hacerse un buen rato. Además del tomate triturado, corregiremos de sal y azúcar y añadiremos un poco de pimentón para darle color.
Cuando esté hecho el pisto, reservamos. Es importante que nos quede denso, en mi caso, debido a que no terminaba de concentrarse, acabé pasandolo por un colador: descarté bastante jugo de tomate que luego reutilicé para la carne.
Picaremos y sofreiremos la cebolla.
A continuación añadiremos la carne picada y la iremos removiendo y haciendo.
Cuando esté hecho, añadimos el vino tinto y un poco de canela, pimentón, el tomate triturado y sal y azúcar para corregir de acidez el tomate. Una vez hecho todo esto, lo dejamos pochar un rato.
Cuando le falten unos minutos añadiremos el resto de las especias.
Nuevamente, aquí es interesante que nos quede lo más “seco” posible, para evitar que la lasaña se quede muy descompuesta. Al igual que en el caso anterior, también tuve que colar el resultado para conseguir densificar adecuadamente el relleno.
Pondremos la leche a calentar en un cazo: si la leche que incorporamos a la bechamel está a punto de hervir, se incorporará inmediatamente a la salsa y apenas tendremos que remover.
Echaremos la mantequilla en una cazuela y la ponemos a fundir. Añadimos la harina y la dejamos tostar un buen rato para matar el sabor.
Luego vamos añadiendo la leche caliente y removiendo.
Montaje
Una ligera capa de bechamel.
Capa de pasta.
Capa de pisto.
Capa de pasta.
Capa de bechamel.
Capa de carne.
y así, vamos alternando pisto y carne hasta cubrir el recipiente. En la capa de carne yo le he puesto bechamel también para que el resultado sea más cremoso.
Finalmente cubrimos con una capa de pasta, añadimos bechamel y al horno, 180 grados. Una media hora.
Luego lo sacamos, le añadimos queso rallado por encima y otro cuarto de hora de horno aproximadamente.